Antes de empezar debemos tener en cuenta el concepto de RTF, el RTF es un formato de texto enriquecido, así tal cual, fue desarrollado originalmente por Microsoft en 1987 y tiene el objetivo específico de ser un formato multiplataforma es decir que puede ser leído en diversos sistemas operativos, la ventaja de tener textos en este formato es que pueden ser leídos precisamente por la mayoría de procesadores de texto, no necesariamente solo Word en alguna de sus recientes versiones, incluso pueden ser abiertos por aplicaciones Web como aplicaciones de almacenamiento en la nube o correo electrónico como es Gmail. Otra de las ventajas es que es mucho menos probable de que documentos con este formato contengan virus y esto básicamente es debido a que RTF no hace uso de macros que es justamente donde los virus suelen ocultarse. Vamos a ver algunos pasos para exportar documentos de Microsoft Word en formato RTF de una manera muy sencilla.
Claro que siempre puedes usar convertidores de formato pero en este caso no hay necesidad de ello pues Microsoft Word ya te da la posibilidad de exportar documentos en RTF. En primer lugar debes haber terminado de redactar tu documento, en este momento te diriges al menú archivo y debes elegir la opción «exportar«, en seguida debes elegir la opción «cambiar tipo de archivo».
Al hacer esta acción bastante sencilla como hemos visto, verás una lista de formatos en los que puedes guardar tus documentos, cada uno de estos formatos tiene su propósito pero en esta ocasión nos vamos a enfocar a la opción de formato RTF el cual podrás ver en cualquiera de las versiones de Microsoft Word, lo que verás al momento de elegir dicho formato es una descripción bastante general y acertada pues en efecto podrás guardar lo más importante del documento que es el contenido, le das Clic o doble Clic, al hacer esto verás la ventana de guardar archivo, es la ventana tan familiar para todos pero que en este caso ya tiene todo listo para guardar el documento en el formato en cuestión.
Ya tendrás todo listo, podrás usar el documento en formato RTF para compartir con usuarios que usan cualquier otra plataforma o procesador de texto, sobre todo si lo que te importa es el contenido y no tanto la estructura o diseño del archivo, también puedes usar tú mismo este documento en un dispositivo de almacenamiento portable como una memoria USB si sabes que tendrás que abrirlo en un dispositivo totalmente diferente al que usas a diario, sobre todo por temas de seguridad y de acceso al texto que contiene el documento.